viernes, 26 de agosto de 2011

Cuando toda tu tu felicidad se basa en si esa persona te ha mirado, te habla, te sonrie. Cuando lo primero que haces cada mañana es comprobar si tienes un mensaje suyo. Cuando al verle el corazón te bombea tan rápido que podría salirse por la boca. 
Cuando lo darías todo por pasar horas y horas a su lado...estás perdida, loca y enamorada. Y no sabes como actuaria él ante tu situación. Sólo sabes que jamás te atreverías a confesarlo. Pero ya sabes: Quien no arriesga no gana. Y puede que suene a tópico pero es la simple y pura realidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario